El envejecimiento, el medio ambiente y el estilo de vida puede tener un impacto negativo sobre la piel, dejándola seca, opaca y desigual. Hidratante y exfoliante facial y corporal puede mejorar estos problemas. Hidratante repone la humedad perdida, mientras exfoliación elimina las células muertas de la piel para dar a la piel un aspecto más suave, más radiante y aumentar la absorción de otros productos para la piel. Como parte de una rutina regular de cuidado de la piel, hidratante y exfoliante puede mejorar la apariencia de la piel.
HIDRATAR EXFOLIAR
Hidratante
Elige una crema hidratante diseñado para tu tipo de piel. Por ejemplo, las personas con piel grasa debe elegir cremas hidratantes ligeros, libres de aceite, mientras que las personas con piel seca pueden requerir una crema hidratante más pesado. Para hidratante facial, elegir un producto que se designa específicamente para la cara.
Aplicar crema hidratante para la cara y el cuerpo, mientras que la piel es ligeramente húmedo, como después de un baño o una ducha, para la mejor hidratación.
Aplicar la crema hidratante una o dos veces al día, o con más frecuencia si la piel está muy seca. Preste especial atención a las zonas propensas a la sequedad, como las manos, los codos y los talones. Considere la aplicación de cremas hidratantes más pesados en la cara y el cuerpo en la noche, especialmente durante los meses de invierno.
Aumenta la humedad de la piel desde el interior por mantenerse hidratado y comer una dieta saludable rica en ácidos grasos omega-3, que se encuentran en los alimentos, como el pescado y las nueces, o comprar suplementos. Consulte a su médico antes de tomar cualquier nuevo suplemento.
Exfoliante
Elija un producto exfoliante que satisfaga sus necesidades. Las opciones incluyen matorrales que usted puede comprar o hacer en casa, guantes exfoliantes o un paño limpio.
Humedezca la piel y aplique el producto exfoliante para la cara o el cuerpo con las manos. Si el uso de guantes exfoliantes, aplicar un gel de baño hidratante sobre la piel mojada y masajear con guantes.
Repita dos o tres veces por semana, según sea necesario para su tipo de piel. Las personas con piel grasa puede necesitar exfoliar con más frecuencia que las personas con piel seca o sensible.
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